La prohibición de los teléfonos móviles, los cambios en el código de vestimenta que incluyen en algunos casos la prohibición de abrigos con capucha y la ropa totalmente negra, e incluso la eliminación de los espejos de los baños de las escuelas son algunos de los cambios que las escuelas de todo Estados Unidos están haciendo en nombre de la seguridad y de un mejor compromiso de los estudiantes.

Los funcionarios a menudo citan la preocupación por la salud física o mental de los estudiantes como razones para las nuevas normas.

Pero las normas y su aplicación no siempre son claras y simples.

La distracción con el teléfono es un «problema importante»

Dado que el 72% de los profesores de secundaria de EE.UU. afirman que la distracción con el móvil es «un problema importante en el aula», según un informe de junio del Pew Research Center, cada vez son más las escuelas que promulgan normas o refuerzan la aplicación de las ya existentes para mantener a los alumnos alejados de sus pantallas.

Pero no se trata de un enfoque único.

Aproximadamente una cuarta parte de los estados tienen leyes para restringir el uso de dispositivos en las escuelas o para recomendar o incentivar su limitación, según descubrió Education Week.

Mientras tanto, cada vez más distritos escolares y campus individuales están elaborando políticas destinadas a mantener a los menores alejados de los teléfonos celulares, las tabletas e incluso los relojes inteligentes durante la jornada escolar.

Pero aunque la medida parece popular entre los administradores escolares –cientos de directores han pedido al rector de las escuelas públicas de Nueva York, David Banks, que «les quite los teléfonos», según ha dicho– no todo el mundo está convencido, incluidos los padres que alegan querer mantenerse en contacto con sus hijos en caso de emergencia.

Mientras algunos de los distritos escolares más grandes del país como las Escuelas Públicas de Nueva York y el Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles sopesan cómo manejar el asunto, muchas escuelas de EE.UU. ya se han atrincherado en reglamentos estrictos y en su aplicación.

Algunas escuelas tienen políticas que prohíben tajantemente que ingresen teléfonos móviles de los alumnos a la escuela, mientras que otras pueden exigir que los teléfonos móviles se guarden en casilleros, mochilas, en la oficina principal o en bolsas magnéticas selladas durante las clases. Otras aún permiten el uso del teléfono inteligente sólo durante los periodos de almuerzo o el recreo.

El distrito de Fort Wayne Community Schools, en Indiana, ofrece un ejemplo de enfoque más concreto y deliberado a partir de este ciclo escolar. Este distrito de más de 28.000 alumnos ha implantado una política de ausencia de teléfonos en todos los centros de secundaria mediante el uso de fundas magnéticas Yondr, una bolsa de tela no más grande que el smartphone medio, según el sitio web del distrito.

Los estudiantes llevan su funda a la escuela y de vuelta cada día, afirma el distrito. Cuando un alumno entra en el edificio, deposita su smartphone y cualquier otro dispositivo electrónico personal en la bolsa Yondr y la cierra pellizcando las solapas superiores. Se espera que cada alumno la lleve consigo y sólo abra la bolsa al final de la jornada lectiva colocándola sobre un gran imán en una estación de desbloqueo, normalmente en las entradas y salidas del edificio.

El distrito tiene una definición amplia de dispositivo electrónico personal que incluye: teléfonos móviles, teléfonos inteligentes, auriculares, audífonos, teléfonos con cámara, dispositivos con cámara, dispositivos de grabación digital, dispositivos de escaneo, asistentes digitales personales (PDA), reproductores MP3, iPods, iPads, tabletas, relojes inteligentes, computadoras, radios, localizadores o cualquier dispositivo o accesorio que permita al usuario acceder a internet.

Los abrigos con capucha, los Crocs y los ‘looks’ totalmente negros

Más allá de los dispositivos, este año académico algunas escuelas están apuntando hacia los armarios de los niños, en lo que los funcionarios dicen que es un esfuerzo por mantenerlos concentrados en clase.

Las sandalias de dedo abiertas, los abrigos con capucha e incluso los Crocs o los zuecos de gomaespuma han estado en contra de las normas durante años en el Instituto Bessemer City de Alabama, según informaron los responsables del centro a WBRC, afiliada de CNN. Sin embargo, si los estudiantes deciden usarlos este año escolar, podría resultar en una suspensión.

Las mallas, los sombreros, las gafas de sol, los zapatos de burbujas, las cintas para el pelo, las gorras o pañuelos, los shorts y camisas a media pierna, los vestidos ajustados tipo bodycon, las camisas y faldas, y los pantalones de mezclilla con agujeros por encima de las rodillas, según la escuela, que anunció el cambio en julio a través de Facebook.

«Esta política es un código de vestimenta para ayudar a fomentar un sentido de comunidad y reducir las distracciones, permitiendo a los estudiantes centrarse en sus estudios», dijo la escuela, haciéndose eco de la racionalidad del código de vestimenta en las escuelas de todo el país, incluyendo una prohibición similar de sudaderas con capucha en las escuelas públicas de Flint, Michigan.

El director de Bessemer City High, Stoney Pritchett, quiere que los padres y los estudiantes sepan que los administradores no buscan disminuir la creatividad de los estudiantes, sino más bien prepararlos para escenarios del mundo real en los que algunos atuendos pueden no ser apropiados o aceptables, dijo a WBRC.

CNN se puso en contacto con los administradores de la Bessemer City High para saber cómo va la aplicación del nuevo código desde que se reanudaron las clases el 8 de agosto.

Mientras tanto, en El Paso, Texas, se anima a los alumnos de una escuela media a que elijan entre las partes más claras de la rueda de colores cuando planifiquen sus atuendos para la jornada escolar. El director de la escuela secundaria Charles Middle School, Nick DeSantis, informó a los padres que la ropa totalmente negra está prohibida este año escolar debido a que se asocia con problemas de salud mental como la depresión, informó KFOX, afiliada de CNN, en agosto.

Los cambios recomendados fueron aprobados a nivel de plantel, dijo el viernes a CNN la vocera del Distrito Escolar Independiente de El Paso, Liza M. Rodríguez, quien agregó que no se ha finalizado una política para todo el distrito.

«Estos cambios incluyen la sustitución de opciones de color para los estudiantes, el mandato de calzado seguro y la eliminación de sudaderas con capucha y bolsillos para reducir las oportunidades de ocultar, usar y distribuir artículos prohibidos», dijo.

El distrito «lamentó… la intención que había detrás de los cambios», añadió. Algunos profesores habían notado un cambio repentino en los estudiantes que pasaban de vestir con color a todo negro cuando estaban deprimidos o estresados, había dicho la presidenta de la Asociación de Profesores de El Paso, Norma De La Rosa, aunque algunos padres se opusieron a la idea de que el color de la ropa refleja las emociones de los estudiantes, informó KFOX.

A los alumnos no se les permite vestir de negro de arriba abajo, pero pueden llevar shorts negros para las clases de educación física o en el «día de vestimenta libre», dijo De La Rosa.

El ciclo escolar comenzó el 5 de agosto.